Cada día que pasa la pesca es mas dificil, merman las capturas, se habla de cambio climático, de aumento de la temperatura y cambio de las corrientes, de micro plásticos, de contaminación en general… grandes macro fabricas, y tambien de que ya no tenemos pastillas de jabón bajo el fregadero, si no, un enorme surtido de productos químicos, todos ellos altamente contaminantes. A esta situación cada día mas desastrosa sumamos ahora esta noticia espeluznante

La costa gallega se encuentra en el ojo del huracán debido a la presencia de bidones nucleares en el fondo marino, frente a sus costas. Ante esta preocupante situación, Francia ha decidido enviar un robot submarino para investigar la situación y evaluar el estado de estos contenedores.

La Historia detrás de los Bidones Nucleares

En la década de 1960 y 1970, Francia realizó una serie de vertidos nucleares en el Atlántico Norte, incluyendo bidones con residuos radiactivos. Estos bidones fueron lanzados al mar sin ningún tipo de control ni supervisión, lo que ha generado una gran preocupación por la seguridad medioambiental y la salud pública.

La Situación Actual

Según informes recientes, los bidones nucleares se encuentran en un estado de corrosión avanzado, lo que aumenta el riesgo de fugas radiactivas y contaminación del medio marino. La situación es especialmente preocupante debido a la proximidad de estos bidones a las costas gallegas y la posible afectación a la pesca y la industria turística de la región.

La Respuesta Francesa

Ante la creciente preocupación, Francia ha decidido enviar un robot submarino para investigar la situación y evaluar el estado de los bidones nucleares. El robot estará equipado con tecnología de última generación para detectar cualquier tipo de fuga o anomalía en los contenedores.

Implicaciones y Consecuencias

La presencia de bidones nucleares en el fondo marino supone un riesgo significativo para el medio ambiente y la salud pública. La corrosión de los bidones puede provocar la liberación de sustancias radiactivas en el agua, lo que puede tener graves consecuencias para la vida marina y la salud humana.

Reacciones y Demandas

La noticia ha generado una gran preocupación entre la población gallega y los colectivos ecologistas. Se ha exigido a las autoridades francesas y españolas que tomen medidas urgentes para abordar la situación y garantizar la seguridad medioambiental y la salud pública.

La situación de los bidones nucleares frente a las costas gallegas es un tema que requiere una atención inmediata y una respuesta efectiva. La decisión de Francia de enviar un robot submarino para investigar la situación es un paso en la dirección correcta, pero es necesario que se tomen medidas más contundentes para abordar la raíz del problema y garantizar la seguridad del medio ambiente y la salud pública. La sociedad gallega y los colectivos ecologistas seguirán vigilantes y exigiendo respuestas y soluciones efectivas a esta preocupante situación.