Se me ocurre inspeccionar el equipo de pesca antes de la salida que tengo al día siguiente y… ¡terror! Nada más levantar la caña de pescar puedo ver que algunas partes de las anillas tienen óxido e incluso ese verdín que tanto “nos gusta” encontrar en ellas… es ahora cuando se nos viene a la cabeza lo que no hemos hecho durante el último año, ¡limpiarlas después de cada uso!
Y es verdad, da igual qué caña poseas, qué anillas tenga colocadas, tarde o temprano aparecerán los síntomas del óxido exhibiéndose al igual que lo hace el pavo real durante su cortejo.
Si no las cuidamos a lo largo de la temporada de pesca, es posible que te encuentres con una non grata sorpresa la próxima vez que vayas a pescar. De acuerdo que hoy en día hay anillas, como las Fuji, que aguantan muy bien el salitre y son prácticamente inoxidables de por vida, pero, el salitre no tiene apremio para actuar y a la más mínima oportunidad aparece. Un impacto o roce de la caña contra las rocas tras los usos continuos en las victoriosas aventuras costeras, puede ser uno de los desencadenantes para que actúe el óxido.
Pero más vale que el óxido salga en ellas más tarde que temprano, porque la cosa no está para ir gastando dinero últimamente. Si sabemos lo dañino que es el salitre, pues por qué esperar hasta el último instante para proteger la caña. Cierto es que hoy en día ya tenemos productos para quitar el óxido y el verdín de las anillas y partes metálicas de la caña, pero da igual, el daño ya está hecho y ahora mismo os digo qué es lo que debéis utilizar para que vuestras cañas estén impecables durante más tiempo. Tengo cañas tanto nuevas como de 1930-1940 y procuro que estén en impecable estado. La pesca no solo es capturar, también es mantener tus herramientas de pesca en perfecto estado.
Siempre, después de cada salida, no basta con mojar las cañas en agua dulce y secar. Yo aplico este producto: PENN rod & reel CLEANER.
Muy fácil de usar y aplicar ya que tiene un difusor que facilita que el producto llegue a todas las partes de la caña. Primero mojo y seco la caña con agua dulce y un trapo. A continuación, hecho el producto spray, por toda la caña y acto seguido le paso suavemente un paño seco por toda la caña y anillas. Este producto no solo te limpia la caña y te la deja como nueva, también te la protege contra la corrosión y el salitre.
Si salgo casi cada día a pescar con la misma caña, utilizaré Penn rod & reel cleaner 1 vez por semana. Si salgo un par de veces al mes, pues al finalizar cada salida le aplicaré el producto.
En esta foto podréis ver una caña del 2019 y otra de 1930-40, ambas en perfecto estado. La caña Shimano, año 2019, la compré en el 2021 y tiene unas 70 salidas aproximadamente y la Allcock & Co, año 1930-1940, que adquirí en el 2019, tendrá unas 40 salidas en agua dulce y unas 14 en agua salada. Ambas están impecables y esta última caña jamás la he tenido que cambiar ni una sola anilla.
Así que ya sabéis, un cuidado preventivo de vuestras cañas tras una jornada de pesca, evitará pequeñas desgracias en un futuro no muy lejano.
¡Saludos para todos y a disfrutar de la pesca!
Román Gancedo
