El jigging, también llamada pesca vertical se ha convertido en los últimos años en la pesca por excelencia a nivel mundial. Originalmente se practicaba casi en exclusividad en Japón hasta que en los años ochenta se comenzó a practicar en Europa.
¿DE DÓNDE PROVIENE EL TERMINO JIGGING?
A esta modalidad la denominamos como jigging, pues la base principal de esta pesca es dejar caer libremente al fondo un jig (señuelo formado principalmente por plomo) e ir recuperándolo a ritmo constante a través de la línea y los movimientos de la caña, movimientos que realizaremos de forma continua para así simular la trayectoria de un pequeño pez hacia la superficie y de esta forma llamar la atención de grandes depredadores.
¿DÓNDE PRACTICAR JIGGING?
Al ser una modalidad de profundidad, se práctica siempre desde cualquier tipo de embarcación, con mayor éxito en zonas que han tenido modificaciones considerables del suelo marino, es decir, embarcaciones hundidas, fondos rocosos, grandes desniveles en el fondo, cambios en el tipo de fondo…
EQUIPOS ADECUADOS:
Para practicar el jigging convencional, habitualmente usaremos cañas de entre 150 y 300 gr de acción, con carretes de entre 5000 y 8000. Éstos siempre tendrán que ser de ratio lento para poder trabajar de forma adecuada nuestros jig. También usaremos líneas entre pe 1,5 y pe 3, con bajos desde 0,40 hasta 0,80. Normalmente no se utiliza grapa en esta modalidad, usamos anilla abierta, junto a anilla cerrada, o rolling, junto a anilla abierta, de esta forma nos aseguraremos que no perderemos a nuestro rival por apertura o rotura de esta. Nuestro equipo dependerá del spot de pesca, siempre pudiendo aumentar o disminuir tamaños de diámetros y acciones si se requiere.
¿QUÉ TIPO DE SEÑUELOS UTILIZAR?
Para esta modalidad, hay un mundo infinito de señuelos de diferentes tamaños, colores, materiales, formas, densidades…
Para el jigging convencional, usaremos señuelos más bien alargados con formas algo más redondeadas, para poder moverlos de forma más ágil, también los veremos de pequeño tamaño con el cuerpo más ancho. Habitualmente, le pondremos 1 assist con 1 anzuelo simple, un assist con 2 anzuelos. En estos anzuelos, en ocasiones, pondremos imitaciones de pulpo o brillos, para así llamar más la atención de nuestros oponentes.
¿SOLO SE DISFRUTAN LOS MÁS GRANDES?
Pues en el mundo del jigging no tenemos límite, hay equipos para todo tipo de acciones y así poder disfrutar desde el pez más pequeño hasta peces inimaginables.
SLOW JIGGING O SLOW PITCH, es una técnica evolucionada del jigging en la que dejaremos caer nuestros señuelos, siempre atentos a la caída de éste, pues es más lenta que los jigs convencionales. De esta manera simulamos un pez herido huyendo hacia el fondo de forma errática. En la recogida, lo movimientos serán menos agresivos. En dicha modalidad, es más común ver equipos de tipo casting, pero se puede practicar igualmente con equipos tipo spinning. En este caso, las cañas serán mucho más sensibles y más blandas para poder sentir y mover mejor nuestros señuelo, pero igual de resistentes que demás modalidades. El rango de acciones a utilizar siempre dependerá de la profundidad de los pesqueros y la especie que busquemos.
VARIANTES DEL JIGGING
Dentro del mundo del jigging, con el paso de los años, se han creado sucedáneos que nos permitirán tentar a estos depredadores sin desgastarnos físicamente. Algunos de los que hablaremos a continuación son: slow jigging, pesca con tai rubber, light jigging, pesca con ichikus, micro jigging.
Nuestros jigs serán más aplanados, de esta forma conseguiremos que la caída sea más lenta con un movimiento en zigzag. También es muy común el uso de vinilos de gran tamaño, pues con estos podemos rascar el fondo y simular de forma más realista la natación de un pez, incluso de un cefalópodo.
PESCA CON TAI RUBBER: Esta pesca, al igual que la mayoría proviene de Japón, denominada así por el tipo de especies a buscar «Tai» (pargo en japonés), y las faldillas de goma de nuestros señuelos «rubbers«.
Esta pesca proviene de los pescadores antiguos, tras observar que los espáridos atacaban las algas que colgaban del final de sus líneas de pesca. Principalmente, esta pesca, la realizaremos a partir de 30 metros de profundidad, es donde más efectiva comienza a ser. Para esta modalidad, la clave está en el equipo. Necesitaremos una caña normalmente de puntera sólida y extremadamente sensible para poder notar la más mínima picada.
Habitualmente se realiza con equipos de casting, un carrete de pequeño tamaño será perfecto para esta técnica. Los señuelos a utilizar, son bolas de plomo perforadas que se deslizan por la línea, al final de esta, pondremos nuestras faldas con los anzuelos. Dejaremos caer nuestro señuelo al fondo y lo dejaremos rebotar (como si de una bola de ping pong se tratase), ascendiéndolo entres 10 y 20 metros aprox, dependiendo de la profundidad en la que nos encontremos. En esta pesca es muy importante hacer una recogida lineal a una velocidad moderada, cuando notemos la picada, la mejor forma de clavar es, ¡NO CLAVAR!, si lo hacemos, podemos correr el riesgo de perder la pieza por desgarre o directamente desclavarla.
El LIGHT JIGGING es un poco más moderno que el jigging convencional, fue creado para poder pescar en las mismas condiciones pero con equipos bastante más ligeros. Para ello necesitaremos disminuir el grosor de nuestras líneas, el tamaño de nuestros carretes y la acción de nuestras cañas. Si todo esto está bien equilibrado, podremos disfrutar de batallas muy enérgicas. Esta modalidad, es un poco más técnica y nos permitirá disfrutar de peces de un menor tamaño en grande profundidades. Al igual que el light jigging, tenemos el light slow pitch, una de las pescas donde tenemos menos desgaste físico y mucha efectividad.
PESCA CON INCHUKUS: Un inchuku no es más que una imitación de un púlpito unido a un señuelos principalmente de plomo con un assist doble, su pesca es una de las más sencillas, únicamente debemos dejarlo caer al fondo, y en su recogida compaginar movimientos ascendentes acompañando la caída con nuestra caña. En esta modalidad pescaremos principalmente el fondo, haciendo «bailar» nuestro señuelo a escasos metros de él.
MICROJIGGING: Al igual que el rockfishing, el micro jigging, es la última incorporación a esta gran familia. Esta pesca, ha sido diseñada para evitar el desgaste físico con peces de pequeño tamaño, tener grandes sensaciones, pero no os equivoques, siempre pueden entrarnos peces de mayor porte, para ellos debemos tener nuestro equipo bien equilibrado. Una caña con una acción muy similar a las de slow, pero mucho más fina, un carrete tamaño 2500, una línea pe 0,8, muy importante que sea de 4 hebras, pues esta absorbe menos agua, es más resistente, y más sensible. Una línea fina hará que nuestros señuelos bajen más recto y un bajo del 0,30 aproximadamente. El equipo siempre se puede aumentar o disminuir, dependiendo de las especies a buscar o profundidades. Con esta modalidad, podemos disfrutar de cualquier especie que ataque nuestro señuelo.
Al contrario que las demás, esta pesca no se suele realizar en más de 80 metros. Actualmente, se utilizan señuelos de tungsteno, pues este material, tiene mayor peso que el plomo en menor densidad. Así, haremos llegar señuelos de tamaños diminutos, donde nunca antes podríamos haberlo hecho. Principalmente está diseñada para espáridos, pero nos puede sorprender cualquier especie.
Eduardo Escobar