La caña del año «2023»

De las rompientes con mala mar Canarias desde las que sacar sierras con vinilos de 15 y 17 gramos, sargos y lubinas con pequeños paseantes, a los lagos americanos, hogar del black bass donde grandes lucios te la juegan y parten el bajo si no te andas con ojo pasando por los caudalosos ríos trucheros gallegos, donde pescar salmón, reo y trucha empleando técnicas como la ballesta para lanzar cucharas y pequeños minnows.

En estos diversos escenarios se han probado varios modelos y marcas de cañas, algunas partieron la puntera en el viaje, otras fracasaron por la longitud, algunas resultaron demasiado blandas y aunque pescaron también perdieron muchas picadas… Un conjunto de situaciones muy diferentes tanto en agua salada como dulce, con especies tan diferentes como la trucha gallega, el black bass americano, o la lubina y la anjova del atlántico han puesto en su sitio a la mejor caña del año. 

Las características las podéis encontrar en uno de nuestros números anteriores, en nuestra web, casi en cualquier tienda online, en el catálogo de la marca, etc. Pero no es su carbono, tampoco su empuñadura ni el tipo de anillas lo que la convierte en la caña del año 2023, ni siquiera la relación calidad precio. 

Cómo es la caña perfecta

Lo que hace que una caña sea “perfecta” en su tramo de acción, (no vamos a comparar la acción de una caña de spinning pesado con una de medio o ligero), es la versatilidad, la comodidad y la durabilidad. La perfecta mezcla de carbono que en su correcta combinación de sensibilidad al conjunto, que notes a la perfección las picadas, pero que a la vez sea reactiva, que de un tirón claves al pez y que después sea capaz de domarlo hasta traerlo, que aguante las embestidas de un pequeño túnido de tres o cuatro kilos como el sierra, pero que a la vez sea capaz de hacerte sentir el toque esquivo de un pequeño sargo.

Cuando llegamos a Galicia a pescar en el río Eo nos encontramos un enorme caudal de agua, con bastante fuerza. Es uno de esos ríos en los que puedes tener problemas si no vadeas con cuidado y en el que además hay grandes piedras en las chorreras, con multitud de algas largas y bastante fondo en las pozas. Un maravilloso río salmonero. Uno de esos ríos en donde la precisión del lance es fundamental, porque está lleno de posturas de salmón y trucha y un fallo asusta y alerta al pez rápidamente.

Pero, sobre todo, donde una pequeña trucha de 20 cm te lo pone realmente difícil si decide tirar río abajo, porque con tanta agua son realmente fuertes. Los pequeños minnows de 3, 5 y 7 cm marcaron la diferencia, así como las cucharillas, hay espacio para lanzar sin problemas, pero hay que cuidar las espaldas.

Sin embargo, cuando pescamos el Turía, nos encontramos todo lo contrario, apenas un palmo y medio de caudal medio y un río muy cerrado donde es literalmente imposible lanzar con una caña larga y es necesario utilizar la técnica de la ballesta para poder lanzar. La mayoría de las cañas no son válidas para esta técnica.

Los gallegos utilizan cañas a las que liman el tramo de la puntera hasta dejarlas planas por un lado, para que sean más flexibles, suelen hacerlo con cañas de fibra de vidrio que tienen muy pocas anillas y cuando vieron en acción una caña diseñada para el mar, la mayoría se sorprendió de cómo doblaba hasta lanzar una diminuta cucharilla del 00 a cinco o seis metros de distancia con tantísima precisión. Una caña corta, potente reactiva y precisa, nuestra caña del año, sin duda.

En Andrews Lake, Estado de Delaware, USA, después de pasar el control policial de muchos aeropuertos internacionales, la caña del año, viajó con nosotros como equipaje de mano, justo bajo la ventanilla, en el espacio que queda entre los asientos y la pared del avión, la longitud de la caña es perfecta para no molestar ni a los vecinos de delante ni a los vecinos de atrás.

Una vez pasado el control y ya con el rumbo puesto hacia nuestro lago nos encontramos unas orillas intransitables en las que hay que pescar desde muelle o desde embarcación. Los black bass grandes se encuentran apostados bajo las grandes ramas de los árboles caídos y colar un montaje texas sin plomar no era sencillo, de nuevo la caña marcó la diferencia. Precisa y ágil pero, a la vez, lanzando paseantes de superficie a largas distancias se llevó la palma. Ponías un señuelo de apenas diez gramos en mitad del lago sin ningún problema para, a continuación, a tirones hacer que todos los lucios de la zona fueran uno a uno a lanzarse sobre él.

Todo un espectáculo del que, sin la rigidez suficiente de la caña, no hubiéramos podido disfrutar. Aguantar la línea tensa cuando tienes un lucio de buen tamaño saltando más de un metro fuera del agua, no es tarea sencilla, hay que tener una caña que sea capaz de mantenerse firme. 

El veredicto final

Y nuestro día a día en mitad del Atlántico, en las Islas Canarias, con pedreros, muelles, rompientes, zonas de pesca difíciles donde muchas veces tienes cinco, seis e incluso diez metros hasta el agua y donde parecería que una caña larga sería más práctica. Y sí, puede que lo sea, pero poder pescar en esas zonas pequeños pelágicos como el sierra con la misma caña que utilizas desde playa para sacar lubinas y pejerreyes (anjova) es la perfecta definición de “versatilidad”.  

Por todo esto “premiamos” a la CINNETIC RAYCAST XBR DART’N 5-15 G con sus 2 metros 20cm, como:

la mejor caña del 2023