LAS CAJAS DEL MAESTRO LONGO

Hemos tenido la inmensa suerte de, mientras disfrutamos de la Festa da Troita de A Pontenova, conocer a, posiblemente, los dos mejores montadores de moscas que hemos conocido hasta la fecha: Vicente y Sergio Longo, padre e hijo.

Conversábamos con ambos y Sergio nos decía:

“Cuando tu padre es Vicente Longo y piensa en poner pelos en las patas de una gusarapa, o te pone un grillo en la mano, lo primero que te preguntas es dónde lo capturó. Hasta que te das cuenta de que tiene anzuelo… sabes que a partir de ahí los montajes que salgan de su torno harán que las cajas en las que habiten serán diferentes a todo lo visto hasta el momento.

Ya estábamos metidos de lleno en este arte tan maravilloso de la pesca, por suerte en los años que todo era novedad tanto en la técnica a mosca seca como el montaje de moscas, y mi padre quiso dar un paso más y no conformarse con lo que había.

Pasar de hacer una mosca ahogada a un Manthis, gusarapa y un largo etcétera de insectos es mezcla de su genialidad, arte e investigación de materiales y herramientas que ni siquiera se comercializaban o que pocas tiendas de pesca tenían. Pero, si no existían… se inventaban.

Muchas horas de ensayo y error en el torno, incluso desmontando moscas de firmas conocidas en aquel momento para ver cómo estaban atadas. Hablamos de épocas en las que no existían los tutoriales como ahora.

Jornadas en el río no solo pescando sino observando qué comen las truchas, qué insectos hay, cómo son y cómo se mueven, libros de entomología y mucho pensar.

Resumiendo, una vida de pasión por el mundo de la pesca y una idea en mente, si la gusarapa tiene pelos en las patas y un grillo antenas, por qué no ponérselas”.

Vicente Longo es un auténtico maestro del montaje de moscas y un gran, mejor dicho, el GRAN PESCADOR a mosca. Asturiano hasta la médula, el maestro Longo y su hijo Sergio nos han dejado meter la nariz en sus cajas de moscas y éstas son algunas de las maravillas que hemos podido ver en su interior: